CAMBIOS PSICO CORPORALES DE PRIMAVERA
Nos
alegra la llegada de la primavera, al ser la antesala del verano, teniendo días más largos al anochecer
más tarde y tener más luz, pero no podemos pasar por alto algunos cambios que
suceden a nivel físico y psíquico con la llegada de esta estación del año.
Se
trata de la ASTENIA PRIMAVERAL que no es una enfermedad sino una sensación de
debilidad física y psíquica, falta de energía y cansancio intenso.
Coincide
con el paso del invierno a la primavera y con el cambio horario de verano que
se inicia a finales de marzo.
Nuestro
cuerpo se tiene que adaptar a la nueva estación con los cambios horarios,
cambios de luminosidad y de temperatura.
Los
síntomas que pueden experimentar algunas personas son:
-cansancio
y debilidad general
-cambios
en el estado de ánimo (tristeza, apatía, irritabilidad)
-dolor
de cabeza y malestar general
-fatiga
intelectual y dificultad para concentrarse
-pérdida
de deseo sexual
-desmotivación
Estos
síntomas suelen ser leves y remiten espontáneamente al cabo de unos días y no
los experimentan todas las personas, por lo que depende de la capacidad de
adaptación de cada persona, aunque si persisten e interfieren en nuestro día a
día pueden ser una manifestación de un problema orgánico o psicológico
(sobrecarga laboral, estrés, depresión).
Si
son pasajeros se alivian con una serie de hábitos:
-seguir
una rutina de horarios más o menos fijos para levantarse y acostarse
-realizar
ejercicio físico
-practicar
alguna técnica de relajación
-crear
momentos libres de estrés realizando una actividad con la que disfrutemos
-mantener
un ritmo y orden en las comidas
-no
automedicarse.